Curso de Gestión de Emociones
Voy a intentar que estés el mínimo de tiempo posible en esta página. Quiero que, rápidamente, decidas si te puede ayudar o no.
Vamos al grano.
Vamos al grano.
Si cuando discutes se te calienta la boca y luego te arrepientes.
Si el propio hecho de discutir ya te altera porque para ti, las discusiones son un conflicto.
Si cuando tienes una bronca pierdes los papeles y luego lo pasas mal.
Si te pasas la vida mordiéndote la lengua porque «te conoces» y no quieres liarla.
Si decides que es mejor no hablar de un tema delicado por miedo a las consecuencias.
Si tienes determinados miedos que te bloquean.
Si acostumbras a hacer lo que quieren los demás y luego te sientes mal.
Si culpas a los demás de cómo te sientes.
Si no te atreves a hacer peticiones a tus jefes, a reclamar lo que crees que es justo.
Si te comparas con los demás para mal.
Si te generas demasiadas expectativas y luego te frustras cuando no se cumplen.
Si eres de las personas que se llevan los problemas del trabajo a casa.
Si esos problemas del trabajo afectan a tu vida en pareja.
Si en vez de responsabilizarte, te culpas.
Si te intimidan las personas que consideras más preparadas que tú.
Si te intimidan las que consideras que tienen más autoridad que la que tú tienes.
Si tienes arrebatos emocionales que no sabes controlar.
Si cuando te encargan un proyecto no duermes por la responsabilidad.
Si no duermes.
Si en momentos de dificultades te paralizas en vez de buscar alternativas.
Si en tu cabeza lo que suele sonar son lamentos.
Si Calimero se adueñó de ti y repite, una y otra vez, «nadie me quiere».
Si te afecta más de la cuenta lo que los demás piensen de ti.
Si te afecta más de la cuenta lo que tú piensas de ti.
Si te después de tener una crítica te hundes o tardas en recuperarte.
Si te dices cosas que no le permitirías decírtelas a nadie.
Si le das mil vueltas a determinados pensamientos.
Si te entran todos los males cuando tienes que hablar en público.
Si te sientes mal porque no tienes la debida paciencia con personas cercanas.
Si cuando piensas en hablar con esa persona que te gusta, sientes angustia.
Si la sola presencia de una persona ya consigue que te sientas mal.
Si éstas o algunas otras cuestiones te hacen sentir mal o te generan reacciones emocionales que no deseas, estás en la página adecuada.
Si el propio hecho de discutir ya te altera porque para ti, las discusiones son un conflicto.
Si cuando tienes una bronca pierdes los papeles y luego lo pasas mal.
Si te pasas la vida mordiéndote la lengua porque «te conoces» y no quieres liarla.
Si decides que es mejor no hablar de un tema delicado por miedo a las consecuencias.
Si tienes determinados miedos que te bloquean.
Si acostumbras a hacer lo que quieren los demás y luego te sientes mal.
Si culpas a los demás de cómo te sientes.
Si no te atreves a hacer peticiones a tus jefes, a reclamar lo que crees que es justo.
Si te comparas con los demás para mal.
Si te generas demasiadas expectativas y luego te frustras cuando no se cumplen.
Si eres de las personas que se llevan los problemas del trabajo a casa.
Si esos problemas del trabajo afectan a tu vida en pareja.
Si en vez de responsabilizarte, te culpas.
Si te intimidan las personas que consideras más preparadas que tú.
Si te intimidan las que consideras que tienen más autoridad que la que tú tienes.
Si tienes arrebatos emocionales que no sabes controlar.
Si cuando te encargan un proyecto no duermes por la responsabilidad.
Si no duermes.
Si en momentos de dificultades te paralizas en vez de buscar alternativas.
Si en tu cabeza lo que suele sonar son lamentos.
Si Calimero se adueñó de ti y repite, una y otra vez, «nadie me quiere».
Si te afecta más de la cuenta lo que los demás piensen de ti.
Si te afecta más de la cuenta lo que tú piensas de ti.
Si te después de tener una crítica te hundes o tardas en recuperarte.
Si te dices cosas que no le permitirías decírtelas a nadie.
Si le das mil vueltas a determinados pensamientos.
Si te entran todos los males cuando tienes que hablar en público.
Si te sientes mal porque no tienes la debida paciencia con personas cercanas.
Si cuando piensas en hablar con esa persona que te gusta, sientes angustia.
Si la sola presencia de una persona ya consigue que te sientas mal.
Si éstas o algunas otras cuestiones te hacen sentir mal o te generan reacciones emocionales que no deseas, estás en la página adecuada.
Digo que estás en la página adecuada porque, estarás de acuerdo conmigo, en que nadie quiere sentirse mal y que, cuando es así, deseamos que sea por el menor tiempo posible, ¿verdad?
Pues esa es la idea de esta página.
Esta página te ofrece un curso con una serie de ideas, conocimientos, recursos y técnicas para entender qué hacer con las emociones que sientes, sobre todo, con aquellas que no quieres sentir.
Pero, dame un minuto y ahora voy con eso.
Hoy en día, todo el mundo habla de emociones: coaches y terapeutas de aquí y de allá; maestros de Reiki y de yoga; consultores y formadores de empresas; instructores de mindfulness e instragramers con aspiraciones.
¡Hasta peluqueros –perdón, estilistas– emocionales he visto!
La realidad es que no tantas personas saben realmente qué son, cómo funcionan y para qué sirven las emociones. De hecho, hay personas que creen que las emociones son algo negativo.
Eso no es así: las emociones no son ni positivas, ni negativas, simplemente son necesarias porque cumplen un papel fundamental para tu vida.
Por eso, rechazarlas, negarlas, esquivarlas, huir de ellas, esconderlas en los rincones de tu mente y cosas por el estilo, es la peor idea que puedes tener.
Por muy mal que te haga sentir una emoción, mírala a la cara porque está cumpliendo una función para ti.
Esto que acabas de leer poca gente te lo dirá; sobre todo, no te lo dirán los gurúes de la autoayuda de ese «mundo feliz» que es Instagram o Facebook, esos lugares los que todo luce de color de rosa y en los que sentirse mal está poco menos que prohibido.
Para decirte que, por muy desagradables que sean, todas la emociones que sientes son útiles, es necesario comprenderlas bien, saber de qué estamos hablando y, sobre todo, por qué la evolución puso en nuestro cerebro un mecanismo de supervivencia tan potente como ese.
Lo repito una vez más:
Todas las emociones que sientes son útiles, todas cumplen una función para ti, todas tienen la misión de ayudarte en esta vida.
Si este mensaje es la primera vez que lo lees o lo escuchas, tienes otro motivo más para seguir leyendo.
¿Eso significa que si sientes una emoción desagradable como el miedo, la angustia, el nerviosismo o la ansiedad tienes que recrearte en ellas?
¿Eso significa que si tienes este tipo de emociones debes aumentarlas o prolongarlas en el tiempo?
Por supuesto que no.
Déjame hacer un paralelismo. Que un dolor sea una señal útil de que algo no va bien, no significa que quiera más dolor y por más tiempo.
Pero, lo que no haré con el dolor será obviarlo, hacer como que no está, esconderlo o aguantar hasta que no pueda más.
Nada de eso es razonable.
Para decirte que, por muy desagradables que sean, todas la emociones que sientes son útiles, es necesario comprenderlas bien, saber de qué estamos hablando y, sobre todo, por qué la evolución puso en nuestro cerebro un mecanismo de supervivencia tan potente como ese.
Lo repito una vez más:
Todas las emociones que sientes son útiles, todas cumplen una función para ti, todas tienen la misión de ayudarte en esta vida.
Si este mensaje es la primera vez que lo lees o lo escuchas, tienes otro motivo más para seguir leyendo.
¿Eso significa que si sientes una emoción desagradable como el miedo, la angustia, el nerviosismo o la ansiedad tienes que recrearte en ellas?
¿Eso significa que si tienes este tipo de emociones debes aumentarlas o prolongarlas en el tiempo?
Por supuesto que no.
Déjame hacer un paralelismo. Que un dolor sea una señal útil de que algo no va bien, no significa que quiera más dolor y por más tiempo.
Pero, lo que no haré con el dolor será obviarlo, hacer como que no está, esconderlo o aguantar hasta que no pueda más.
Nada de eso es razonable.
Si has llegado hasta aquí seguramente sea porque te has identificado con alguna de las cosas que has leído;
o porque sientes emociones que no quieres sentir; o porque hay situaciones que te generan sensaciones desagradables y quieres que eso cambie;
o, tal vez porque, simplemente, te gusta el tema y quieres saber más.
Sea como sea, estarás esperando conocer qué vas a conseguir cuando hagas este curso de Gestión de las emociones.
Voy a eso pero primero, quiero decirte qué NO vas a conseguir con este curso.
Con este curso no vas a conseguir una terapia. Lo digo de otra manera:
Este curso no sustituye ningún tipo de terapia.
Un curso es un curso y una terapia es una terapia y convienen no confundir una cosa con la otra.
Si por el estado en el que te encuentras necesitas terapia, este curso no la va a sustituir. Mejor, ve a terapia.
No creas que me estoy tirando piedras a mi tejado, no es eso. Soy psicólogo y estoy harto de ver cómo, bienintencionada o malintencionadamente, se ofrecen cursos que prometen solucionarte lo que no te van a solucionar.
Un curso sirve para aprender y en este curso de Gestión de emociones vas a aprender muchas cosas pero insisto, no es una terapia.
o porque sientes emociones que no quieres sentir; o porque hay situaciones que te generan sensaciones desagradables y quieres que eso cambie;
o, tal vez porque, simplemente, te gusta el tema y quieres saber más.
Sea como sea, estarás esperando conocer qué vas a conseguir cuando hagas este curso de Gestión de las emociones.
Voy a eso pero primero, quiero decirte qué NO vas a conseguir con este curso.
Con este curso no vas a conseguir una terapia. Lo digo de otra manera:
Este curso no sustituye ningún tipo de terapia.
Un curso es un curso y una terapia es una terapia y convienen no confundir una cosa con la otra.
Si por el estado en el que te encuentras necesitas terapia, este curso no la va a sustituir. Mejor, ve a terapia.
No creas que me estoy tirando piedras a mi tejado, no es eso. Soy psicólogo y estoy harto de ver cómo, bienintencionada o malintencionadamente, se ofrecen cursos que prometen solucionarte lo que no te van a solucionar.
Un curso sirve para aprender y en este curso de Gestión de emociones vas a aprender muchas cosas pero insisto, no es una terapia.
QUÉ VAS A OBTENER CON ESTE CURSO.
Ahora que ya nos entendemos, deja que te cuente qué vas a obtener en este curso.
– En primer lugar y de una vez por todas, vas a tener claro qué son las emociones y en qué se diferencian de su prima hermana las sensaciones.
De hecho, vas a poder hacer algo que es complicado y es poner nombre a lo que estás sintiendo.
Eso es importante porque, lo que no puedes nombrar, no puedes gestionarlo, así que, cuando sepas qué emoción o qué sensación estás sintiendo, podrás comenzar a modificarla, si es que es eso lo que deseas.
– Vas a conseguir ver las emociones de forma diferente a cómo las veías porque conocerás cuál es la función que cumplen.
Cuando sabes su función y cómo te ayudan, ya no las ves de la misma manera, ni las sientes de la misma manera.
Ya no hará falta que reniegues de ellas o que intentes no sentirlas. Entender las emociones como útiles te descargará de la culpa que a veces puedes sentir por experimentar una sensación que no quieres.
– Vas a poder analizar por qué, cuando te sientes extremadamente contento o extremadamente triste o extremadamente lo que sea, no es buena idea tomar decisiones importantes como, por ejemplo, comprar cursos de 4 mil euros –sé de lo que hablo–.
Esto te ayudará a evitar algunos arrebatos irracionales de los que luego te arrepientes.
– ¿Le darías el mando a distancia de tus emociones a otra persona? ¿Te parece buena idea que otra persona tenga la capacidad de decidir cómo te sientes? ¿Verdad que no es buena idea?
Pues cabe la posibilidad de que estés haciendo eso cuando, por ejemplo, dices cosas como «esto lo hace porque no me quiere» o «no me dio el proyecto a mí porque piensa que no soy bueno».
El curso te dará pistas sobre cómo manejar este tipo de situaciones.
– De la misma manera, ¿le darías el mando a distancia de tus emociones a las circunstancias del entorno? ¿Verdad que tampoco parece una buena idea?
Pues cabe la posibilidad de que estés haciendo eso mismo cuando te dices cosas como «no me han escogido para el puesto, no valgo lo suficiente» o «éste tiene más éxito que yo. No soy válido para esto».
En este caso, repito lo de antes, el curso te dará pistas sobre cómo manejar este tipo de situaciones.
– ¿Quieres conocer la terapia más barata del mundo? ¿Sabías que un bolígrafo puede hace que pases de tener mal humor a tener buen humor? ¿Sabías que es imposible sentirse de mal humor si saltas a la comba?
En el curso vas a descubrir cómo eso es posible y por qué tu posición corporal influye en lo que piensas y en lo que sientes.
– Voy a darte una mala noticia. Igual ya la sabes pero no está de más que te lo recuerde. Tienes creencia que son absolutamente irracionales y esas creencias pueden hacer que te sientas mal.
No quiero que te ofendas por lo que te acabo de decir. Todos tenemos creencias irracionales que están escondidas pero que nos afectan enormemente.
El curso te va a ayudar a descubrirlas y te va a dar pautas para cambiarlas por otras mucho más adaptativas.
– ¿Sabes por qué los modelos son útiles? Porque aportan claridad, proporcionan explicaciones claras que nos ayudan a entender lo que nos ocurre.
Pues bien, en el curso vas a conocer uno de los modelos explicativos de las emociones más arraigados en el mundo de la psicología y en ámbito terapéutico.
Vas a poder entenderlo fácilmente y, lo que es más importante, vas a entender muchas de las reacciones emocionales que tienes ahora.
– Por último, y no menos importante. Seguro que, además de todo lo que te he contado, querrás contar con técnicas concretas, ¿verdad? Por supuesto que sí.
¿Te gustaría contar con técnicas con las que vas a poder experimentar enormes mejoras en situaciones en las que las emociones desagradables te jueguen malas pasadas?
Lo tienes.
¿Te gustaría conocer cómo puedes incrementar aun más las sensaciones agradables que experimentas?
También lo tienes.
Todo bien explicado y listo para practicar.
Y TODO ESTO, ¿POR CUÁNTO?
Después de conocer todo lo que vas a ganar con el curso querrás conocer su precio. Pues ahí va:
El curso de Gestión de emociones, consta de 8 vídeos en el que vas a conocer:
– Qué son las emociones y para qué sirven.
– Cuál es la relación entre lo que piensas, lo que haces y lo que sientes.
– Uno de los modelo explicativos de las emociones más conocidos y eficaces en terapia psicológica.
– El conocimiento y reconocimiento del papel de las creencias irracionales en tu conducta y tus emociones.
– Técnicas como el abogado del diablo, la generación de estados, la racionalización de la emoción.
– Más técnicas como, por ejemplo, una para regular tus emociones en el justo momento en el que la estás sintiendo u otra para disociarte de las situaciones que no te gustan.
Déjame decirte dos cosas que no te he dicho hasta ahora:
La primera es que este mismo curso lo imparto en una escuela de negocios y, ¿sabes qué?, que los alumnos de esa escuela de negocios pagan por el mismo contenido 10 veces más de lo que te va a costar a ti.
La segunda es que este curso no va a estar disponible durante mucho tiempo. El tiempo dependerá de la acogida que tenga pero, en algún momento lo retiraré de la venta y, si en algún momento volviese a estar disponible, su precio será mayor que el de ahora.
Ahora, ya sabes, lo adquieres por 109 euros, IVA incluido.
Seguro que lo vas a disfrutar.
Óscar.
La primera es que este mismo curso lo imparto en una escuela de negocios y, ¿sabes qué?, que los alumnos de esa escuela de negocios pagan por el mismo contenido 10 veces más de lo que te va a costar a ti.
La segunda es que este curso no va a estar disponible durante mucho tiempo. El tiempo dependerá de la acogida que tenga pero, en algún momento lo retiraré de la venta y, si en algún momento volviese a estar disponible, su precio será mayor que el de ahora.
Ahora, ya sabes, lo adquieres por 109 euros, IVA incluido.
Seguro que lo vas a disfrutar.
Óscar.